Registro
Un cristal archivador, o registrador, tiene formas de pirámide grabadas claramente en uno o más de sus lados. A veces, estas formas están separadas, de modo que la faceta está cubierta de triángulos; otros muestran sólo una, y a veces se interpenetran mutuamente en forma de galones. Estos cristales suelen ser, aunque no necesariamente, de cuarzo claro. Simbolizan la perfecta armonía entre el cuerpo, emociones, mente y espíritu, y el ojo que todo lo ve. Los cristales registradores contienen la impronta de todo lo ocurrido anteriormente, y son portales de la sabiduría espiritual. Cuando se pone uno de los triángulos sobre el tercer ojo, es posible meditar con este cristal para acceder al pasado personal o colectivo, o resintonizar con tu propia sabiduría, y fomentar comprensiones evolutivas. Los registradores son un excelente medio para explorar tu yo interno. Pueden actuar como catalizadores del crecimiento y ayudar a remover obstáculos al progreso. Reenergetizando todo tu ser, pueden prevenir el agotamiento.
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